Por fin Google ha presentado su última apuesta: Chrome OS, un sistema operativo que tratará de competir con Windows, Mac OS X y todas las distribuciones de Linux.
Google Chrome OS está contruido sobre el kernel de Linux, pero posee un sistema propio de ventanas. A diferencia de Android, pensado para móviles, Chrome OS nace para ejecutarse en ordenadores (PCs y Macs).
Sin embargo, su principal característica y novedad frente a otros, es que necesitaremos estar conectados a Internet para usarlo. Y es que Chrome OS se basa en la tan mencionada «nube» o cloud computing. Es la palabra «de moda» y la dirección hacia la que avanza Google, tal y como afirmó Bernardo Hernández hace unos días en FICOD 2009.
Con el término cloud computing se hace referencia a todas aquellas aplicaciones que funcionan directamente desde Internet y guardan sus datos en la red sin necesitar el disco duro de nuestro ordenador. Si quieres un ejemplo, piensa en la mayoría de las aplicaciones de Google.