Según datos de la Unión Internacional de Telecomunicaciones, en los últimos 10 años, en los 49 países considerados como «menos avanzados» según la ONU, el número de líneas contratadas ha pasado de 2 millones en el año 2.000 a 280 millones en 2010.
En palabras de José de la Peña a EFE, responsable del área de Debate y Conocimiento de la Fundación Telefónica, este crecimiento de las telecomunicaciones observado en los países en vías de desarrollo supone un «salto enorme». La explicación se debe en su opinión a que «la tecnología que va más deprisa es la telefonía móvil«.